La consellera de Medio Ambiente, Elena Cebrián, advirtió ayer a la comarca de la Vega Baja que hay que dar soluciones ya al problema de las basuras antes que otras comarcas -en referencia a l'Alacantí y Alto Vinalopó, que la soportan a través de sus vertederos de Xixona y Villena a los cuales van a parar- se alcen y se movilicen. Así lo dijo en una comparecencia en las Cortes Valencianas para responder a una pregunta de la diputada autonómica de Compromís, Mireia Mollà, en referencia a qué se está haciendo para resolver el hecho de que la Vega sea la única comarca de la Comunitat que no es autosuficiente en la gestión de sus residuos.

Cebrián considera que el Consorcio de residuos no lo está haciendo mal, «existe ya un considerable trabajo de la actual dirección -que encabeza el diputado autonómico Manuel Pineda, a la sazón alcalde de Rafal (PSOE)- para apostar por fórmulas de recogida selectiva, algo para lo cual será preciso, dijo, «poner de acuerdo a los ayuntamientos en nuevas fórmulas para pasar de ser la comarca más negra a la más ejemplar. Por nosotros no quedará, nuestra apuesta por este tipo de recogida es un hecho e insistiremos en ella. Nos da igual que se llame quinto contenedor, puerta a puerta... ejemplos los hay, y muchos, a lo largo de Europa e, incluso, en el Estado español».

Brugal

El principal problema es el de los plazos. La consellera recordó que el actual problema es heredados del PP e «inaceptable» y recordó que el problema de los residuos está en manos de los juzgados -caso Brugal-, «es una de las materias que más hora de trabajo ocupan en esta Conselleria», dijo la titular de Medio Ambiente. «El resto lo tenemos que conseguir sin que los ciudadanos tengan que pagar tanta incompetencia y tanta mafia de sus bolsillos, pagando más de la cuenta por la gestión de los residuos».

Cebrián aseguró que una comarca tan poblada, «no puede estar sin instalaciones ligadas a la gestión de residuos. Parece mentira pero así es» y con respecto a la puesta en marcha de, al menos, una planta de transferencia, fue incapaz de dar un solo plazo, aunque admitió que «las plantas de xixona y Villona han sido la solución, pero es una solución caduca. Estas plantas llegará un día que dirán basta y esta Conselleria estará a su lado» e insistió en que hay que buscar n lugar donde instalar una estación de transferencia, «la gestión de los residuos continúa siendo "de emergencia" (...) Una vez quede resuelto el tema de la estación de transferencia habrá que disponer de la empresa que haga la gestión de esta situación de emergencia. Es la fórmula para que, después, se lleve la basura a las plantas con las que llegar a acuerdos y se consiga un precio unitario. Al mismo tiempo se pondrá en marcha el proceso para la licitación de la solución definitiva».