El Ayuntamiento ha iniciado un expediente de compra de 58 pistolas eléctricas o armas de electrochoque -«taser», en su denominación más popular en inglés- para el personal de la Policía Local interino, según ha anunciado este lunes el alcalde José Manuel Dolón (Los Verdes). La legislación impide que los agentes interinos ejerzan funciones de seguridad ciudadana y no pueden portar las armas de fuego reglamentarias que llevan sus compañeros con plaza fija. El primer edil matizó que pese a esa limitación legal los interinos, que representan más del 35% del total de la plantilla de policías locales, deben atender en Torrevieja labores de apoyo a la seguridad y se encuentran con situaciones de peligro en la que deben defender su integridad personal y la de los vecinos. El primer edil indicó que esta decisión se suma a la renovación de las armas reglamentarias que habían solicitado los sindicatos y las prácticas de tiro. Buen parte de los sindicatos han cuestionado duramente a la dirección de la Policía y a los sucesivos gobiernos locales por recurrir a los interinos en estas funciones y no sacar a oposición las plazas vacantes hasta el punto que muchos de estos policias eventuales llevan trabajando más de una década en esa situación.

Comisiones Obreras mostró ayer su sorpresa por el anuncio del alcalde recordando que el uso de armas «taser» genera fuertes críticas porque es capaz de generar heridas graves y que exige además un curso de capacitación previa.