¿Se puede conducir un vehículo público con los asientos rotos, el suelo agujereado, el exterior con abolladuras y con más de 300.000 kilómetros? El Sindicato Profesional de Policías Locales y Bomberos (SPPLB) considera que no y lo ha denunciado tras constatar que el Ayuntamiento de San Fulgencio no atiende sus demandas para una más que necesaria renovación del parque móvil. «Los medios materiales con que cuenta la plantilla se encuentran en un estado lamentable para ejercer la función de servicio público», resumen. Según el SPPLB, los tres coches tiene más de 300.000 kilómetros y, lo que es peor, se encuentran «en un estado de deterioro importante y con reiteradas averias». Eso sí, pasan la ITV.

El sindicato asegura que el equipo de gobierno sólo hace que darles largas con este asunto,«siendo la respuesta que se está estudiando o que en breve se nos informará, e inclusive se ha dado el caso de culpabilizar a los agentes de la falta de cuidado en el uso de los vehículos», añaden en un comunicado. Según el sindicato, también están sufriendo un recorte en cuanto al presupuesto para la adquisición de la ropa de trabajo, «para la uniformidad de este invierno tan sólo nos han permitido solicitar ropa con un valor de hasta 100 euros, coste insuficiente para la adquisición de la uniformidad necesaria, teniendo que usar los agentes prendas con muchos años de antigüedad».