El campo de golf La Marquesa de Rojales, inauguró ayer la imagen de la virgen de Medjugorje, un pequeño municipio situado en Bosnia-Herzegovina y conocido mundialmente porque el 24 de junio de 1981, la Virgen María «se apareció a seis jóvenes», diciendo que era la Reina de la Paz y para recordar y pedir lo que ya había pedido en apariciones de otros lugares.

La imagen de La Gospa o madre ha sido colocada en un pedestal en una de las plazas del paraje en cuyo interior se han colocado piedras del monte bosnio donde apareció la virgen y del Santuario de Fátima. Junto a ellas, también e encuentra una medalla de San Benito, de protección contra el mal.

La plaza religiosa, en pleno centro del campo de golf, ha sido diseñada para ser lo más fidedigna al enclave bosnio. Por ello la talla de la virgen es una replica exacta de la original, de un metro y 60 centímetros de altura, realizada con el mismo tipo de piedra y tallada expresamente en Bosnia con destino a Rojales.

Otro aspecto destacado es su vegetación, con palmeras y otras especies como un milenario olivo de tres ramas y que simboliza Padre, Hijo y Espíritu Santo.

Todo ello, según María González, una de las responsables de la iniciativa devocional, para que sea «un lugar de paz y de meditación» pero sobre todo, añade, «para que la Virgen sea conocida por el mayor número de gente posible y cambien su vida para mejor, como me ocurrió a mí cuando visité Medjugorje».

A la inauguración acudieron autoridades religiosas y locales, así como una multitud de devotos para descubrir la imagen.