Años llevamos clamando por la solución de los juzgados de Orihuela, de los antiguos porque son nuestros y no nos los devuelven; de los nuevos, porque nos deben los seis millones de euros que les pagamos por ellos, gracias a la ocurrencia de la manifiesta incompetencia del exalcalde José Manuel Medina, quien pagó con dinero de todos algo que era competencia y responsabilidad del gobierno valenciano y que ni tan siquiera tuvo redaños para exigirle después su devolución a su compañero Francisco Camps. Página negra de la Orihuela adormecida y sometida a la voluntad caprichosa de los inútiles militantes durante tantos años de gobiernos del Partido Popular.

En estos momentos y con un gobierno progresista en la Comunidad Valenciana, con una cercanía evidente a varios de los grupos que nos gobiernan y con un presidente valenciano socialista, es de esperar, si aún no lo han hecho, que le exijan tanto sus compañeros locales como los comarcales de cuyos servicios se benefician, que se haga justicia con Orihuela. Que se le devuelva ya el dinero de los nuevos juzgados y que de inmediato se les entregue, como mínimo, la posesión de los antiguos, al menos que veamos los oriolanos que lo intentan y que justifican de una forma evidente su interés en la solución de los problemas pendientes.

Las discusiones y reyertas dialécticas en los plenos están bien; los buenos emolumentos que cobran de las instituciones, pase; pero, al menos, que los ciudadanos veamos que la oposición planta cara ante estas y otras graves causas pendientes y la entreguen ante estas justas reivindicaciones, dejando un poco de lado las batallitas de salón. Así que... ¡Señores socialistas y resto de la oposición local, Valencia está cerca, al señor Ximo Puig, también lo tienen cerca, que esperan para hacerle llegar el mensaje de petición de justicia que Orihuela precisa.