Denunciar las abusivas condiciones de los bancos a la hora de ejecutar desahucios y pedir que la dación en pago sea la regla y no la excepción. Una guerra continua de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca que ayer «ganó una batalla», tal y como señalaron desde la formación, al lograr el objetivo de que las tres sucursales de una misma entidad de Orihuela echaran el cierren tras la toma de las oficinas por parte de los integrantes de las plataformas de toda la provincia.

Movimientos locales de Orihuela, Torrevieja, Callosa de Segura, Elche y Elda se distribuyeron por la ciudad para hacer oír sus demandas de «cesar las órdenes indiscriminadas de desahucios y forzar a que se nos escuche, que lo que pedimos no es más que negociar y que se nos conceda una dación en pago o un alquiler social antes de echarnos a patadas de nuestras casas», señaló ayer una de las manifestantes.

Indiferencia, desde luego, no crearon, pues las protestas originaron que el banco optara por cerrar poco después de las 10 horas las tres oficinas de la ciudad, en una acción conjunta y coordinada de la PAH en la Comunidad Valenciana y Murcia. La fijación con esta entidad, explicaron en un manifiesto, viene a raíz de que «a pesar de haber aumentado sus beneficios en más del doble, sigue quitándonos nuestras casas y la de las personas que nos avalaron, exigiendo deudas de por vida y negándose a realizar un plan de pagos asequible».

La Policía Nacional identificó a varios miembros de la Plataforma tras el aviso de la entidad, si bien no se produjo ningún tipo de altercado ni detenciones, tal y como confirmaron las propias fuentes policiales. Los integrantes de la PAH empapelaron las sucursales con sus peticiones, y prolongaron su protesta durante toda la mañana, incluso una vez cerradas las oficinas.