El presidente del Consorcio de Residuos de la Vega Baja, Manuel Pineda, criticó ayer al alcalde de Orihuela, Emilio Bascuñana, por «la irresponsabilidad que está mostrando este municipio que genera el 40% de los residuos de la comarca» y «ni siquiera se atreva a ofrecer una ubicación para una planta de transferencia a pesar de que gobierna uno de los términos municipales más grandes de España».

Pineda criticó igualmente a los grupos del PP y de Ciudadanos de Almoradí por tumbar la propuesta del equipo de gobierno local (PSOE e IU) que se ofreció a acoger la planta de transferencia de la comarca, algo que tildó de «cínico» porque mientras el PP exige soluciones, luego las boicotea.

Con respecto a la reciente sentencia del TSJ que ha avalado que la anterior presidenta del Consorcio, Luisa Pastor, propusiera adjudicar el contrato a Cespa-Ortiz en la variante que situaba el vertedero en Albatera, tras ser anulada la opción de Torremendo, Pineda dijo que los socialistas acatan esta sentencia pero dijo que él «nunca hubiera firmado ese contrato».

En otro orden de cosas Pineda dijo que el Consorcio quiere emprender un plan de concienciación social porque «no es posible que en vez de llegar ofertas» para acoger la planta de transferencia, «sólo nos llegue el rechazo de comerciantes, asociaciones de empresarios y vecinos». A ese respecto, valoró que es importante realizar una campaña para explicar qué es una planta de transferencia y que no se tenga miedo a una instalación que insistió en que no genera molestias.

También manifestó su voluntad de que las reuniones de la comisión de gobierno del Consorcio pasen a celebrarse en el edificio de la Diputación en Rojales para evitar desplazamientos a Alicante y sólo llevar al palacio provincial las reuniones en las que participan los 27 regidores de la comarca.