El juzgado de instrucción 2 de Torrevieja ha acordado el archivo del caso «Vela Mata», en el que se investigan supuestas irregularidades en la apertura y funcionamiento de una discoteca de La Mata, que apuntaban a la presunta comisión de delitos de prevaricación y falsedad documental. La denuncia, formulada por un policía local, acabó salpicando al exalcalde, Eduardo Dolón (PP), quien fue citado a declarar por la Guardia Civil «en calidad de imputado», al igual que el intendente principal de la Policía, Vicente Sola, el inspector Manuel López Vera y un técnico; mientras que el exconcejal de Urbanismo y Actividades, Paco Moreno, y otro técnico lo hicieron como detenidos por la Benemérita y quedaron libres.
La magistrada que ha instruido la causa ha determinado ahora que de las diligencias, «no resulta debidamente justificada la perpetración del delito que dio motivo a la formación de la causa», acordando en un auto de 13 de enero el sobreseimiento provisional. Fuentes municipales informaron que se está estudiando la posibilidad de recurrir esa decisión judicial puesto que al Ayuntamiento le fue admitida su petición de personarse en la causa el mismo día en que se dictaminó el archivo pero, al ser parte, podrá intentar impulsar la reapertura de la causa.
La denuncia que originó el inicio de las actuaciones en 2014 indicaba que un empresario de la hostelería abrió un local en la Avenida de los Españoles 1 de La Mata, que incumplía supuestamente la normativa para ejercer la actividad como discoteca, en relación a medidas de seguridad, aforo o insonorización. La actividad generó quejas vecinales de una urbanización junto a la discoteca, en primera línea de playa, con recogidas de firmas y denuncias ante el Defensor del Pueblo por la contaminación acústica.
Pasividad
Según consta en las diligencias practicadas por la Guardia Civil, el exedil de Actividades y Urbanismo, Paco Moreno, prestó declaración como detenido el 7 de julio de 2015 y fue puesto en libertad después al considerar que «no iba a eludir la acción de la justicia, al tener domicilio conocido y arraigo en Torrevieja, así como por su manifestación expresa de comparecer al primer llamamiento que fuera objeto por parte de la autoridad judicial».
Al intendente principal se le citó a declarar por la Guardia Civil con abogado por «la pasividad a la hora de afrontar el tema de denuncias y quejas vecinales» además de «dar por buena la licencia de apertura de la discoteca aun siendo consciente de que cuando abrieron la actividad los nuevos propietarios, la anterior actividad no se ejercía, por lo que la licencia debería de haber caducado o decaído». El ingeniero técnico que fue detenido, supuestamente, «informó favorablemente de todo el procedimiento para la concesión del cambio de titularidad, cuando debido a todas las reformas estructurales realizadas en el establecimiento debería haber abierto un nuevo expediente para la concesión de licencia de nueva apertura con los proyectos técnicos y la documentación necesaria».
La discoteca Vela Beach fue finalmente clausurada en el verano de 2015 cuando la Generalitat notificó el cierre cautelar de la instalación hasta que la mercantil subsanara las «anomalías muy graves» detectadas en inspecciones que comprometían la seguridad de los usuarios y de sus trabajadores. A esta decisión se le añadió una propuesta de sanción de 43.000 euros que fue recurrida.
