Los lixiviados de Orihuela y en especial la planta de residuos de Proambiente han vuelto a las Cortes Valencianas de la mano del diputado de Podemos por Alicante, Antonio Estañ, quien preguntó el miércoles en el pleno de Les Corts a la consellera de Medio Ambiente, Elena Cebrián, si ya ha instado al Gobierno Central a cerrar el vertedero, «tal como dictaminaba la moción aprobada por el parlamento valenciano a propuesta de Podemos el pasado mes de noviembre».

En un comunicado, Estañ recuerda que «la gestión de los residuos y sus constantes relaciones con la corrupción en la comarca de la Vega baja tiene el nombre de Proambiente, tiene el nombre de Brugal y ha tenido en la inacción y la irresponsabilidad, por no usar otros términos, la práctica habitual de la anterior consellería».

El parlamentario en su intervención inquirió a la consellera para saber si se ha llegado a una decisión de solución definitiva de tratamiento en el terreno, tras las primeras actuaciones sobre los lixiviados, con más de 200.000 litros extraídos y trasladados a depuradoras, actuación, dijo, «necesaria, pero con el consiguiente gasto. Además, es insuficiente para solucionar los problemas del vertedero de forma definitiva». También advirtió que los lixiviados «no parecen haber afectado a la capa freática ya que continúan reapareciendo».

Estañ preguntó a la consellera si se ha llegado a un acuerdo con la Región de Murcia, «ya que entendemos que cualquier medida que verdaderamente solucione este grave problema medioambiental y sanitario debe partir, dadas las circunstancias, también judiciales, de una actuación conjunta con la comunidad con la que se comparte vertedero y problema y con la que, según diferentes comunicados, se han anunciado reuniones».