La autopsia del ciudadano sueco de 65 años de edad, residente en Torrevieja, cuyo cadáver fue descubierto el lunes por la tarde en el domicilio familiar de la calle Santander después de que su hijo realizara una llamada al «112» advirtiendo del suceso, ha revelado que la muerte sobrevino por una trombosis, según aclaró ayer en Alicante, en una comparecencia, el delegado del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Juan Carlos Moragues.

Como ha publicado INFORMACIÓN, el hijo fue arrestado después de constatar que el hombre presentaba signos de violencia; de hecho, algunos vecinos relataron tanto a los investigadores como a los periodistas que se acercaron a la vivienda que éste le había agredido en plena calle.

El juzgado de guardia de Torrevieja ha acordado hoy prorrogar la detención del hijo hasta disponer de los informes forenses sobre el caso, según el Tribunal Superior de Justicia valenciano (TSJCV).

Moragues pidió ser «prudentes y cautos» y dejar avanzar la investigación policial para determinar «exactamente qué sucedió», explica en un comunicado la agencia Efe. Las pesquisas se centran en tratar de concretar «si hay relación o no entre lo que hizo el hijo con el padre» para saber «si eso provocó o no la muerte. Vamos a esperar y ver qué a qué conclusiones se llega para dar traslado al juzgado" con el fin de que éste «decrete si ha habido algún delito o no».