La superficie cultivada con limones en la provincia de Alicante ha descendido un 34% desde el año 2.000, lo que supone 4.790 hectáreas menos. La reducción ha motivado un descenso en la cosecha, lo que ha incrementado los precios, que se sitúan en al actualidad en hasta un euro por kilo. El incremento del precio ha animado a algunos agricultores a retomar estas plantaciones, por lo que la Unió de Llauradors y ramaders estima que en un periodo de cuatro años podría haber de nuevo una superproducción de limones.
El sindicato agrario cifró ayer en 30.074 hectáreas la superficie que en la actualidad se encuentra plantada con limoneros en la provincia, que concentra un 99% de la producción de este cítrico en la Comunitat. Gran parte de esas plantaciones se encuentran en la Vega Baja. Según La Unió, hasta el momento se puede decir que la campaña actual es mejor que la anterior en lo que se refiere a precio, ritmo de cosecha y calidad de la fruta. Al igual que le ocurrió al resto de cítricos, las altas temperaturas y vientos registrados mayo y el excesivo calor de principio de verano afectaron al cuajado del limón, aunque éste ha tenido buen calibre y se está posicionando bien en los mercados. La variedad de limón fino se ha retrasado respecto a otras campañas en unos diez días, lo que ha provocado que no se haya acumulado fruta acumulada en almacenes mientras se está cosechando puntualmente. No obstante,señalan que debido a esa disminución de la superficie cultivada y al descenso de la cosecha, es muy probable que en torno a los meses de abril y mayo haya problemas de abastecimiento en los mercados por falta de este cítrico.
Aunque el descenso de la cosecha está motivando que los precios que se están pagando este año sean mejores que los del año anterior, desde La Unió destacan que esos beneficios no compensan las pérdidas de los últimos cinco años. «Si nos retraemos al último lustro, el balance del productor de limones de Alicante es claramente negativo».
Descontrol
El ascenso de los precios del limón ha motivado que cada vez más agricultores se animen a recuperar este cultivo, pero según el colectivo agrario, como consecuencia de esa falta de control de las plantaciones, en cuatro años podría haber de nuevo una producción excesiva de limones, lo que motivará la caída en picado de los precios. No obstante esa tendencia al alza en los cultivos de limón todavía no ha sido cuantificada.
Los últimos datos estadísticos que maneja La Unió reflejan que la superficie citrícola en Alicante ha disminuido del año 2013 al 2014, con una variación negativa del 4,8% en naranjos (con 701 hectáreas menos); del 2,2% en mandarinos (con 155 hectáreas menos y del 1,3% en limones (120 hectáreas). En relación al total de la campaña citrícola, son las naranjas y mandarinas las que peores precios están cosechando este año.
