La principal alegación de la propiedad -casi todas han sido rechazadas- es que sobre el local rigen una medidas cautelares de un juzgado de lo Contencioso que le permitieron seguir adelante con su actividad sin problemas hasta que resolviera el procedimiento.

El Consell recuerda que se trata de medidas judiciales de una orden de cierre anterior y no de la actual, del 28 de agosto. En referencia al resto de incidencias técnicas, como las carencias en el revestimiento del cableado del sistema eléctrico y la falta de conexión del sistema contra incendios indica que serán subsanadas. También ha pedido a Costas permiso para hacer una acera junto al principal acceso al local.