A partir de mañana y «durante ocho o diez días» los oriolanos disfrutarán de la zona azul de forma gratuita al expirar el contrato de la empresa encargada de la Ordenanza de Regulación del Aparcamiento (ORA), la mercantil Esma Park, al no haberse adjudicado aún el nuevo contrato de prestación del servicio. Así lo apuntó ayer el edil de Contratación, el popular Francisco Sáez, quien apuntó que los parquímetros serán precintados esta medianoche por decreto de Alcaldía.
Las máquinas expendedores se volverán a abrir cuando se firme el nuevo contrato ya que, finalmente, los técnicos no han llegado a tiempo de adjudicar el servicio de forma que se permitiese enlazar el anterior contrato con el que permanecerá en vigor los próximos años (cuatro más dos prorrogables). Serán ocho o diez días los que los técnicos necesiten para terminar de estudiar las memorias técnicas de las ocho mercantiles presentadas al concurso y pasar a la última fase, la oferta económica, para baremar las distintas ofertas de las que saldrá la ganadora del concurso, que pagará al menos 150.000 euros anuales. Una vez adjudicado, el contrato deberá pasar por la Junta de Gobierno Local para su aprobación. La empresa deberá presentar un aval que el pliego establece como canon anual y que podrá ser mejorado por las mercantiles que optan al concurso.
A partir de esta noche, la actual adjudicataria, Esma Park, tiene que entregar las llaves de los parquímetros a la Policía Local para que posteriormente se haga entrega de las mismas a la nueva adjudicataria que podrá explotar estas máquinas expendedoras hasta que se coloquen las nuevas máquinas que el Consistorio pedía en los pliegos, que pasan por introducir mejoras como el pago con tarjeta, a través de una aplicación móvil o vincular la matrícula al tique de estacionamiento. Un cambio de infraestructura que debe hacerse dentro de los primeros 45 días posteriores a la firma del contrato.
Oriolanos y visitantes disfrutarán de los próximos días de los aparcamiento de zona azul de forma gratuita, pese a que en un principio se barajó la posibilidad de que el Ayuntamiento asumiera el servicio durante unos días, algo que no era posible. La marcha de Esma Park deja abierto saber si algún día el Ayuntamiento podrá cobrar los más de 450.000 euros que le adeuda porque durante los seis años de gestión del servicio nunca ha pagado ni un euro.
