Los efectos del temporal en Rojales, con numerosos destrozos a causa del viento y la caída de más de 150 árboles, ha obligado al Ayuntamiento a contratar a tres empresas para que colaboren con las brigadas en la retirada de troncos y árboles de la vía pública, ante la imposibilidad de que los operarios municipales asuman tal cantidad de trabajo, señaló ayer a INFORMACIÓN, Nahúm Méndez, concejal de Hacienda y Contratación, quien aseguró no conocer aún a cuánto ascenderán estas labores hasta tener el informe técnico aunque «saldrá caro».

Los trabajadores continuaron ayer con la retirada de árboles y barro en la Avenida de El Recorral, donde se concentran una tercera parte de los árboles caídos, unos 50, según fuentes municipales. En este punto ya se concentraron el lunes numerosos operarios municipales y de Protección Civil, ayudados por una unidad de Bomberos, para retirar los árboles caídos en la vía pública y que suponían mayor problema para el tráfico de vehículos y personas. De la misma forma, se retiraron algunos ejemplares que cayeron sobre las viviendas, en el entorno del Parque Natural.

Otra zona donde se registraron mayores inconvenientes, en la cual las brigadas se emplearon ayer a fondo fue en la calle Ópalo, en la conocida como subida al Recorral. Se trata de una avenida con numeroso arbolado a lo largo de ella y donde se registraron numerosos desperfectos. Los árboles también fueron arrancados en numerosos parques del centro de la ciudad. En Ciudad Quesada, el viento arrancó vallas publicitarias y hasta la carpa que techa el parking del Hotel La Laguna, que ayer seguía por los suelos.

Hasta 14 horas sin luz

Sin embargo, las molestias que más sufrieron los vecinos fueron las de las dos averías eléctricas que dejaron sin suministro a 1.000 afectados. La primera se produjo en torno a las 6.30 hora del lunes, y afectó a 800 puntos de luz. Una avería en una línea de media tensión fue la culpable, aunque el suministro se restableció sobre las 15 horas. Sin embargo, poco después, se producía otra avería en otra línea de media tensión, que afectó a 150 puntos, por lo que algunos vecinos enlazaron una avería con otra, por lo que estuvieron hasta pasadas las 21 horas sin suministro, más de 14 horas. «Se trata de averías muy complejas porque hay que ir examinando la línea de forma exhaustiva al no saber en qué punto se ha producido», apuntó Iberdrola.