La desastrosa gestión con el servicio de la Ordenación y Regulación del Aparcamiento (ORA) en Orihuela tiene otro capítulo más: la adjudicataria Esma Park SL se comprometió en 2009 a poner a disposición del municipio dos vehículos que los técnicos están buscando sin encontrar y que deberían pasar ahora a engrosar las arcas municipales, al igual que los expendedores de tiques, para ser utilizados dentro del parque móvil municipal. Como ha venido publicando INFORMACIÓN, la mercantil acaba su contrato el próximo día 11 y desde que se adjudicó el servicio hace seis años no ha ingresado ni un solo euro de los recaudados en la vía pública por el estacionamiento en «zona azul» ni tampoco ha liquidado las multas de tres euros abonadas por los ciudadanos a través de un segundo tique. En total, más de 450.000 euros hasta el pasado verano es lo que debe una empresa que ni tan siquiera se presentó al nuevo pliego de condiciones.

En un informe fechado el 31 de julio por el ingeniero del área de Infraestructuras se constata que la empresa concesionaria, según consta en el mismo: «No ha adquirido el vehículo furgoneta destinado a recaudación y el vehículo ciclomotor para averías y mantenimiento, tal y como se comprometió en su oferta». El informe se realizó dos semanas después de que Francisco Sáez Sironi se hiciera cargo del área de Infraestructuras para inventariar aquellos bienes que al término del contrato por seis años tenían que pasar a poder del Ayuntamiento; de hecho, el edil Sáez Sironi ha dicho que los actuales expendedores -con los que comenzará a funcionar la nueva contrata- serán vendidos a la adjudicataria que tiene la obligación de poner unos nuevos de última tecnología que permitan, entre otras posibilidades, el pago con tarjeta o a través de internet o, incluso, prorrogar el tique.

Incumplimiento

Según fuentes municipales, el incumplimiento de una cláusula como era la adquisición de material prometido hace cinco años -además de que no se haya pagado un euro en este tiempo- hubiera sido causa añadida para justificar el rescate de la contrata. Lo curioso del caso es que han tenido que pasar casi seis años para que alguien se diera cuenta, a la hora de reclamar la reversión de las instalaciones recogidas en el inventario en favor del Ayuntamiento, que faltan dos vehículos. El Ayuntamiento de Orihuela ha dado ahora un plazo de diez días a Esma Park para que aporte la furgoneta y el ciclomotor que comprometió a su oferta, algo que a estas alturas suena poco menos que a imposible. Todo hace indicar que a la factura final que se tendrá que dilucidar en los tribunales se añadirá como carga adicional estos dos vehículos.

Como ya publicó este diario, el Ayuntamiento tiene previsto que la ORA sea gratis desde el cese de Esma Park y hasta la adjudicación del servicio por lo cual no se tendrá que pagar a partir del día 12 porque el 11, según el contrato, es el último de vigencia y, consecuentemente con ello, se puede seguir multando.