Orihuela está dispuesta a pagar 3,5 millones de euros por las obras para levantar un bulevar en la ciudad sobre el túnel soterrado por el que circula desde comienzos de año el tren. Así lo confirmó ayer el equipo de gobierno (PP) tras una reunión con el resto de portavoces municipales en la cual el Partido Popular obtuvo el respaldo de Ciudadanos (C's), y sólo de esta formación, para llevar adelante este proyecto. Con ello se supone que el PP tiene garantizado ya el poder sacar adelante cuantos acuerdos plenarios futuros se tengan que suscribir al respecto para ceder aprovechamientos urbanísticos en favor del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif). Sin la firma de otra formación que le diera votos para alcanzar una mayoría hubiera sido imposible que el ejecutivo que preside Emilio Bascuñana se hubiera decidido a presentar un convenio del que se habla desde hace cinco años y que por primera vez tiene forma y precio. El diario ya adelantó en su edición del miércoles la cifra que figura al final del documento y ayer era el plazo de dos días que el regidor había dado al resto de formaciones para que le dijera si estaban con él o no en este proyecto. Bascuñana tiene prisas para intentar lograr que los actuales responsables de Adif lo suscriban antes de concluir la legislatura, el 20 de diciembre, porque en caso contrario tendría que negociar de cero con los nuevos responsables cuando estos fueran nombrados, lo que retardaría la solución final probablemente más de medio año.

Cambiemos, PSOE y Foro Demócrata se negaron a suscribir el proyecto y sólo los socialistas hicieron públicas sus razones; de hecho, llegaron a calificar de «auténtica rendición» ante Adif la propuesta y de perjudicar con ello los intereses de la ciudad. Las críticas vinieron de parte del edil Antonio Zapata, quien precisamente ha sido víctima de los ataques del PP desde el verano por cómo negoció este convenio el pasado mandato desde su puesto como responsable del área de Urbanismo. El hecho de que haya desaparecido el cuarto paso que el socialista proyectó es el principal motivo por el cual su grupo no lo apoya, además de asegurar que cuesta más de lo que él negoció. Zapata añadió que permitir que Adif dirija las obras supone que queden fuera de la misma cualquier empresa local, que no se podrá beneficiar de un contrato que permitiría generar puestos de trabajo. El PSOE también se quejó de que el alcalde les pusiera delante para su firma un convenio en el que, dijo, ellos no han participado, pese a que quien más lo conocía era él porque hasta mayo lo tuvo en su despacho y lo hablaba directamente con Adif. Ahora bien, el resultado final no le gusta.

El equipo de gobierno explicó que a la reunión acudió además de los portavoces un ingeniero externo especialista en infraestructuras ferroviarias, Manuel Castaño, para resolver dudas. «Esta nueva reunión, la quinta desde que se iniciara esta legislatura (sic) se enmarca dentro de la exigencia de transparencia y participación que el alcalde y concejal de Urbanismo, Emilio Bascuñana, ha querido ejercer para abordar la negociación con Adif (...). Este convenio contempla que el municipio hará frente al pago del cubrimiento de algo más de 800 metros a su paso por el casco urbano, así como de los pasos de la Senda Cascante y la conexión entre la calle Luis Barcala y la Carretera de Hurchillo por un importe cercano a un millón de euros. Por otro lado, el acuerdo que propone el consistorio a Adif también prevé la inversión municipal de 2,5 millones de euros en la urbanización de la losa». Bascuñana destacó en una nota que esta urbanización se hará «teniendo en cuenta los resultados de la participación ciudadana a través de la encuesta que hemos ofrecido a los vecinos, y después de un concurso de ideas técnico que recoja estas demandas de los oriolanos».