El camposanto de Orihuela dispone de unas 700 plazas libres tras la última ampliación de hace unos años, cuando se construyeron 1.000 nuevos nichos. En total «tenemos referenciados unos 20.000 nichos», aseguraron ayer desde el Obispado, por lo que, a corto plazo, la pérdida de espacio producida por la adecuación de los tres bloques derribados, no presenta un problema para la capacidad del cementerio oriolano, mientras se construye un cementerio municipal, del que Orihuela carece. i. j. i.