Por Todos los Santos nieve en los altos, por San Andrés, nieve en los pies» a decir del refrán. Este año un frío suave ha entrado en Torrevieja antes de tiempo. Ya llevo puestos los calzoncillos tipo el gaitero, es decir, largos hasta los tobillos. Mis circunstancias personales ya se que no le interesan a nadie, como tampoco despiertan ningún tipo de interés la mayoría de las batallitas del abuelo cebolleta amontonadas a golpe de ruedas de prensa.

Pero volviendo al frío. Da la impresión de que las huestes populares en la oposición han sido atacadas de lleno por el fresco mañanero reinante, hasta el punto de parecer que andan tiritando. Por su parte, el pentapartido en el gobierno municipal también parece estar un tanto destemplado. En ambas sensaciones de malestar podría estar el origen de lo que llevamos oyendo y leyendo bastante tiempo. En el PP han perdido incluso los pelendengues porque fuera del Ayuntamiento todavía hace más frío que dentro.

¿Cómo se le ocurre decir al PP que los ciudadanos están acojonados por miedo a las represalias del pentapartido? En el mismo plan se mueven la hora de convertirse de la noche a la mañana en paladines portadores de las quejas vecinales. Acuden incluso a lugares donde ni les llaman.

Denuncian en los medios, en algunos casos respondiendo a la verdad y con toda la razón del mundo, como el de la carencia de limpieza integral en las urbanizaciones. Y todo ello con un con qué: En lo infundir canguelo, y lo más grave tomar represalias, ellos han sido auténticos maestros de la trampa y el enredo durante largos años, los mismos que los vecinos de los extrarradios viene sufriendo con la limpieza integral al ser relegados como de segunda o tercera clase en la contrata de las basuras. Paradójicamente sendos despendoles se pueden deber a un cinismo sin límites (del cinismo siempre se ha dicho que es la fuerza de los débiles) o al fanatismo, lo cual sería mucho más grave.

Lo peor de todo este asunto es que se creyéndose con todo el derecho del mundo a continuar fisgoneando. Eso si está muy feo. No es de recibo el seguimiento enfermizo que realizan a la edil del PSOE Fanny Serrano a la cual odian algunos, otros admiran y reconocen su capacidad mulicargo y otr@s envidian su porte. No deja indiferente a nadie.

Luego están las redes ¿sociales? y su páginas locales. Entré en ellas una vez y no he vuelto a hacerlo. No tengo ese pecao. Aún así me llegan asquerosos ecos de juzgados de guardia.

En este contexto intenta gobernar el pentapartido lastrado con suelas de plomo en sus zapatos, como los buzos, para evitar dar carnaza a sus enemigos políticos. Patinaron con la gestión del transporte escolar. Lo han hecho también, es decir mal, en lo de la gestión del programa de las fiestas patronales, y posiblemente se equivoquen en otros temas. Los cinco gobiernos con sus cinco partidos lo ha rebautizado el edil del PP Joaquín Albaladejo, no sin acierto en algún caso. Muchos de sus 12 concejales afirman que esto es la política y ellos no la han inventado. Pues vale. Me borro. Procuraré escribir sobre la mar y los barcos.