La dirección de los centros educativos que han logrado restablecer las líneas de transporte gratuito de la Generalitat, para los alumnos que están a más de tres kilómetros de sus viviendas, en especial los cinco institutos, han ordenado pasar lista a los usuarios para comprobar que efectivamente los están utilizando.

Los responsables de los centros han detectado que los autobuses sí presentan el nivel de ocupación previsto en su regreso, sobre las dos o tres de la tarde, desde los institutos y los colegios a las paradas, pero no al revés. A primera hora, muchos de los alumnos que tienen concedido el transporte son trasladados en vehículos particulares hasta los centros educativos porque la distancia entre las viviendas y las las paradas estipuladas es a veces de más de más de medio kilómetro y les obliga a madrugar -sobre las seis y media de la mañana para estar a las siete y cuarto en su parada correspondiente-.

El Consell suprimirá las líneas que no den un mínimo de ocupación previsto. Cada una de las rutas supone un desembolso anual de los presupuestos de Educación de 250.000 euros. El restablecimiento por parte del nuevo Consell del criterio de la distancia de tres kilómetros a pie o en vehículo para ser beneficiario del servicio -frente a la medición en línea recta- ha permitido que 600 alumnos puedan ser usuarios de este servicio y paliar el recorte de las ayudas al transporte municipal que concedían por parte del Ayuntamiento a los alumnos que residen a menos de tres kilómetros del centro.