El concejal de Contratación de Orihuela, Francisco Sáez Sironi (Partido Popular) anunció ayer algo que se veía venir: la mercantil Esma Park SL, la adjudicataria desde noviembre de 2009 del servicio de Ordenación y Regulación del Aparcamiento (ORA) no se ha presentado al concurso cuyo plazo se cerró el lunes. El asunto no dejaría de ser menor si no fuera porque esta mercantil no ha ingresado un euro en las arcas públicas a cuenta de los más de 2 millones de euros que ha declarado que han cobrado en los parquímetros por esta tasa municipal desde que asumió el servicio.

El Ayuntamiento de Orihuela tiene interpuestas reclamaciones contra su adjudicataria por cerca de medio millón de euros; de ellos, dos terceras partes ya en periodo de cobro ejecutivo. Lo curioso del caso es que hasta 2014 este asunto no estalló; es decir, nadie se puso manos a la obra para llevar a la vía de la reclamación los incumplimientos de las liquidaciones que puntualmente -eso sí- anunciaba la mercantil. El portavoz de Ciudadanos, Juan Ignacio López-Bas, ya advirtió en un reciente pleno que probablemente la empresa se marcharía sin pagar y el problema que puede suceder es que, a continuación, desaparezca porque, según explicó, carece de más actividad en otros negocios del sector. Se supone que a esa deuda de 500.000 euros se sumará el resto de los meses que van desde el verano hasta la liquidación del servicio. Ayer nadie del Ayuntamiento de Orihuela daba un euro por una solución que no pase por una reclamación ante los tribunales... si hay alguien a quien reclamar.

Sáez Sironi, quien no rehuyó las preguntas sobre qué va a hacer el Ayuntamiento -aunque tampoco tuvo respuestas para todo pero se le vio muy tranquilo- explicó que se han presentado al concurso ocho mercantiles. Cuatro de Madrid y otras tantas de Barcelona, Cádiz, Alicante o Elche. El hecho de que sólo la mitad haya presentado la documentación por registro y el resto lo tenga que hacer en los 10 días próximos a través de correo certificado, puede alargar el siempre complicado proceso de selección y más cuando al Ayuntamiento le corre prisa, y mucho, pues el día 11 de noviembre Esma Park cesará en su servicio y, a partir de ese día, ¿qué? Para el caso -más que probable- que no se llegue a tiempo en la adjudicación el Ayuntamiento tendría la posibilidad de cancelar el servicio hasta que la nueva empresa se hiciera cargo de él, funcionando con las actuales máquinas expendedoras, que pasan a propiedad municipal, y con el personal de la empresa con el que se tendrá que subrogar en cuanto a condiciones de trabajo y sueldos. Pues bien, Sáez Sironi aseguró que pase lo que pase no habrá un periodo de «ORA gratis» en Orihuela, aunque no supo explicar cómo se podrá gestionará.

El responsable de Contratación aseguró que se iba a pedir un esfuerzo a los técnicos -los políticos han salido de esta mesa- para agilizar al máximo el proceso de selección que incluye tres fases. Apertura del sobre A, para saber si todas cumplen los requisitos; del B, con la oferta técnica que se valorará; y, por fin, del C, que dirá cuáles son las ofertas económica que realizan porque, tal y como aseguró el edil hace algunas semanas, la empresa tendrá que pagar un canon a partir de ahora para no tener que justificar, recibo a recibo, lo que cobra en las calles. La puja mínima comienza por 150.000 euros anuales para hacerse con el contrato por cuatro años más dos de prórroga.

El Ayuntamiento ya informó en su día que la empresa que se quede el servicio tendrá un periodo para cambiar todos los parquímetros con otros nuevos y que estos incorporarán las nuevas tecnologías para poder renovar el tiempo de estacionamiento, incluso, a través del móvil o de internet, además de permitir el pago con tarjeta de crédito, algo que era muy demandado no sólo por los vecinos sino por los comerciantes que veían cada día cómo estos les pedían cambio para poder pagar.

En otro orden de cosas, Sáez dio cuenta de lo aprobado por la junta de gobierno, en la que se dio el visto bueno al pago de facturas por 130.000 euros, tres licencias de obra mayor y un permiso de tenencia de animales peligrosos. Además se dio conocimiento a tres sentencias de disciplina urbanística sin decir en qué sentido.