Baños adaptados y visibles desde el aula, cambiadores de pañales, juegos infantiles y hasta hamacas para descansar. El colegio público Villar Palasí inició ayer el curso escolar para el programa piloto de la Conselleria que pretende escolarizar a los niños de dos años. Las clases comenzaron con una semana de retraso debido a la necesidad de adaptar el aula para que los baños sean accesibles desde la misma e instalar cristaleras para que los docentes no pierdan de vista a los niños en ningún momento. La inversión para realizar esta obras ha corrido a cargo del Ayuntamiento, que ha destinado una partida de 2.500 euros más IVA para realizar los trabajos.

Los cuatro primeros alumnos comenzaron ayer las clases, y cada día se incorporarán otros cuatro compañeros para que la integración sea progresiva. Juguetes y material de ocio y didáctico completan las instalaciones que están formadas por dos aulas. En primer lugar, se ha habilitado el espacio donde los niños desarrollarán su actividad escolar y donde se encuentra la sala de juegos. Es el espacio donde los escolares pasarán la mayor parte del tiempo y es también donde se encuentra el baño, conectado a este aula.

Por otra parte, junto a esta clase se ha instalado el comedor, que estará separado del resto de niños del colegio y es también donde se ha incorporado la zona de descanso con camitas para que los pequeños puedan descansar después de comer. Y es que el horario será igual al del resto de niños. La edil de Educación, Begoña Cuartero, y el alcalde, Emilio Bascuñana, conocieron ayer las instalaciones.

El servicio de comedor se iniciará de cara a noviembre, una vez se hayan incorporado todos los alumnos, para que poco a poco se vayan adaptando al colegio, pues aunque algunos de ellos ya tienen experiencias en guarderías privadas, para muchos ésta será su primera experiencia escolar con más niños. La Concejalía de Educación recibió 29 solicitudes para 18 plazas, lo que confirma la demanda de este servicio. La baremación de solicitudes originó un empate a 13 en las dos últimas plazas, que se decidió por sorteo en el consejo escolar.