Bernardo Ruiz, uno de los deportistas más queridos de la Vega Baja y santo y seña del ciclismo tendrá una distinción de primer orden por parte de la Generalitat que se dará a conocer mañana tras la reunión del Consell y como preámbulo al 9 de Octubre, el día de la Comunitat. A propuesta del conseller de Deporte se le concederá el premio al Mérito Deportivo, que también corresponderá a dos instituciones -la asociación de deporte adaptado y el Burjassot- y a cinco deportistas y exdeportistas valencianos, caso de la saltadora de longitud Concha Montaner. Bernardo Ruiz (8 de enero, 1945) se alzó con la victoria de la Vuelta Ciclista a España en 1945 y fue premiado como el mejor atleta de España en 1951. Estas dos son tan solo las dos primeros éxitos que el oriolano recordó ayer cuando este diario le dio la noticia. «No sabía nada, me acabo de enterar», apuntó, sorprendido. A punto de cumplir 91 años, Bernardo asegura que los recuerdos de su etapa como deportista, aunque quedan muy lejos, los tiene muy presentes. Es, dice, «incapaz de elegir uno, por no desmerecer todos los demás» y a las personas que le acompañaron en cada uno. Aun así, y aunque alejado de la bicicleta, confiesa que sigue de forma asidua las competiciones deportivas por la televisión, «el único entretenimiento que me queda. Sigo el ciclismo y el fútbol», confiesa.
Este reconocimiento otorgado por el Consell es el último de entre «muchísimos, no sabría decir cuántos», apuntó. Ahora tendrá que buscar hueco para esta distinción que aglutina a todas las demás, pues es el reconocimiento a toda una vida como uno de los más destacados ciclistas.
La naturalidad con la que recibió ayer la noticia, casi sin inmutarse, consagra la humildad que le ha caracterizado a lo largo de su carrera. «Si tengo que ir a recoger el premio, iré... me llevará mi hijo», añadió, aunque se mostró algo incrédulo con la noticia «hasta que no me llamen», añadió.
Paradójicamente, «en Orihuela es donde menos me conocen, me conocen más en el norte de España y en Cataluña». Sin embargo, llevará el nombre de la ciudad a las celebraciones del 9 de octubre, pues se trata del único vecino de la Vega distinguido con este galardón.
