El secretario autonómico de Medio Ambiente y Cambio Climático, Julià Álvaro, adelantó ayer a INFORMACIÓN que la Generalitat Valenciana apoyará de manera firme la reivindicación de las comunidades de regantes de la Vega Baja, que rechazan tener que regar con agua extraída de pozos de sequía mientras que el agua del río Segura, de mejor calidad, se destina a los regantes del trasvase.

Durante el discurso que Julià Álvaro pronunciará hoy en la comisión de Medio Ambiente hará referencia a la «situación absolutamente injusta» a la que se está sometiendo a los regantes del regadío tradicional para obligarles a regar con un agua «de una calidad muy inferior» y teniendo en cuenta «que no hay motivos para ello, porque el río tiene agua».

«Nos parece una petición muy razonable y desde la Generalitat expresamos todos nuestro apoyo», dijo Álvaro, quien se comprometió a que el gobierno autonómico realizará «todas las gestiones que pueda para defender los derechos de los regantes ante la CHS y el Ministerio de Agricultura». No obstante, dijo que desde el Consell «no queremos hacer ningún gesto que induzca a pensar que nosotros podemos resolver este asunto. No vamos a engañar a los regantes, pero sí les diremos que les apoyamos y que haremos toda la presión que podamos para defender sus intereses».

El manifiesto al que se suma la Generalitat está apoyado por los representantes de los Juzgados de Aguas, Sindicatos de Riegos y Comunidades de Regantes de la Vega Baja, que exigen que «se respeten los derechos de sus 30.000 regantes y se paralicen de forma inmediata los pozos de sequía de la Vega Media que están en marcha, solicitando a las administraciones, partidos políticos y agentes sociales que se sumen a un manifiesto en el que expresan las necesidades para mantener el futuro de la agricultura y del regadío de la Vega y el respeto de sus seculares derechos» sobre el agua.

Apoyos

Las reivindicaciones de los regantes está amparada por la Federación Nacional de Comunidades de Regantes (Fenacore) e incluye la reclamación de la modernización del regadío y la paralización de los pozos de sequía para tratar de salvar una agricultura que, en su globalidad, «no es rentable ni competitiva». En el documento apuntan a que a pesar de que « es muy alto el aprovechamiento actual del agua en los regadi?os de la Vega, Baja donde su ejemplar red permite utilizarla hasta cuatro veces, el agua cada vez que realiza un ciclo se va salinizando, y utilizar el tradicional sistema de entandes solo funciona si las acequias llevaran los mismos caudales con los que fueron establecidos», de ahí la necesidad de no reducir el caudal. Además, argumentan que el agua de los pozos de sequía contiene una salinización mayor que la que circula por el cauce del río Segura, lo que acentúa el problema. En definitiva lo que exigen es una « modernización real, eficiente y duradera» de los sistemas de riego.

Por todo ello, se organizarán protestas ante la sede de la CHS en su sede de Murcia al ser el organismo que ha dado luz verde a la utilización de esos pozos de sequía.