La confirmación de la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS) a la extracción de agua de los pozos de sequía de la Vega Media, para compensar a los regantes de la Vega Baja el trasvase de agua que se realizará desde la cuenca del Segura a los regantes del trasvase, ha colmado la paciencia de las 17 comunidades de regantes que finalmente elevarán sus protestas ante la sede de la CHS en Murcia.

La reivindicación vendrá amparada por Federación Nacional de Comunidades de Regantes (Fenacore) tras el compromiso de su presidente de ser la primera entidad que rubrique un manifiesto en el que los agricultores reclaman la modernización del regadío y la inmediata paralización de los pozos de sequía para tratar de salvar «una agricultura que, en su globalidad, no es rentable ni competitiva». La Fenacore está reunida estos días en Irlanda, donde celebra su conferencia anual en la cual regantes de diversos países intercambian experiencias.

Hasta allí se han trasladado los presidentes de algunas comunidades de regantes de la comarca, como el Juez de Aguas de Orihuela, Manuel Larrosa, por lo que será a su regreso, de cara a la próxima semana, cuando los 17 presidentes de las comunidades de la Vega, que representan a más de 30.000 agricultores, se reúnan para fijar la fecha de las protestas en Murcia y soliciten formalmente una reunión con el secretario autonómico de Medio Ambiente, Julià Alvaro, para trasladar sus inquietudes y conseguir, por escrito, el apoyo que han recibido sólo de palabra por parte del Consell.

El manifiesto fue remitido ayer a diferentes asociaciones y a los diferentes partidos políticos con el fin de llegar a Murcia con el mayor apoyo social posible para hacer más fuertes sus reivindicaciones. En el documento, apuntan a que a pesar de que «es muy alto el aprovechamiento actual del agua en los regadi?os de la Vega, donde su ejemplar red permite utilizarla hasta cuatro veces, el agua cada vez que realiza un ciclo, se va salinizando y utilizar el tradicional sistema de tandas solo funciona si las acequias llevaran los mismos caudales con los que fueron establecidos», de ahí la necesidad de no reducir el caudal. Además, el agua de los pozos de sequía contiene una salinización mayor que la que circula por el cauce del río Segura, lo que acentúa el problema.

El documento va más allá de acabar con las consecuencias del decreto de sequía y busca revitalizar la agricultura de la comarca más a largo plazo, lo que debe pasar por «una modernización real, eficiente y duradera», aseguran.