La inspección realizada en agosto contabilizó uno a uno a 703 personas en el interior del local sobre una superficie de poco más de 500 metros cuadrados. 619 más que las que permitía su licencia vigente y 267 más que las permitidas en el proyecto que había presentado la actividad para legalizar las instalaciones. La Guardia Civil alerta de que en todas las inspecciones realizadas antes del cierre siempre existía este exceso de aforo.