El curso escolar arrancará el jueves en Orihuela con diversas asignaturas pendientes tanto por parte de la Conselleria de Educación como del Ayuntamiento, aunque éste culpó a los anteriores gestores. Según apuntó ayer la edil Begoña Cuartero, la Concejalía aún tiene pendiente resolver 24 partes de incidencias reclamadas por los diferentes centros, correspondientes a «todo el ejercicio de 2015 y que aún no se han subsanado». La edil no especificó qué tipo de actuaciones reclaman los centros pero sí apuntó que se trata de deficiencias de mayor envergadura que los cerca de 400 partes que sí se atendieron durante el pasado curso por pequeños arreglos de carpintería, azulejos caídos o arreglos de cerrajería.
Además, los alumnos del colegio Playas de Orihuela afrontan un nuevo curso en barracones donde han cumplido 13 años. Educación sacó a licitación hace meses el centro, cuyo plazo de solicitud para presentar ofertas terminó el 25 de junio, sin que se haya producido aún su adjudicación. Con mayor frustración afrontarán el curso los escolares del IES Playa Flamenca, también en Orihuela Costa, pues a pesar de la Conselleria anunció que el edificio de ladrillo estaría listo para este curso, aún quedan trabajos por realizar, según confirmó el presidente del AMPA, José Manuel González, por lo que habrá que esperar, al mínimo, hasta Navidad. Otra de las cuestiones aún en el aire, a falta de tan solo dos días para arrancar el curso, es el de las líneas de transporte de los alumnos de San Bartolomé,La Aparecida, Desamparados o Los Dolses, como ya apuntó la edil el viernes pues la Conselleria ha vuelto a pedir al Ayuntamiento que acredite las dificultades de acceso a estos centros, tales como la distancia o la orografía del terreno (en el caso de la Costa, por ejemplo, los alumnos deben atravesar la autovía), lo que ésta criticó ayer.
