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La sardina «aparece» a final de verano y se cotiza en el mercado hasta 10 euros el kilo

La lonja registra 57.000 kilos en las siete primeras jornadas en las que se ha podido capturar

Una imagen captada durante la mañana de ayer en la lonja de Torrevieja. loino

Primeras capturas de sardinas en lo que va de verano. La lonja de Torrevieja ha comercializado durante las últimas siete jornadas cerca de 57.000 kilos de sardinas tras varios meses en los que la escasez de esta variedad ha motivado que se pusiera a la venta principalmente boquerón. El aumento de la oferta de este producto no se ha traducido, sin embargo, en un descenso de los precios en mercados de abastos y pescaderías. Su coste en algunos establecimientos del centro torrevejense llegaba ayer a alcanzar los 10 euros el kilo, un precio que se ha mantenido durante casi todo la época estival, en la que se ha ofrecido sardina traída desde el norte de la península y cuyo precio ha llegado a rozar los 12 euros por kilo.

En la lonja de Torrevieja, las cajas de siete kilos de sardinas se están cotizando estos días a una media de entre 28 y 30 euros, un precio que varía en función del volumen de capturas que los barcos traen cada día. Así, la semana arrancó el lunes con una pesca de 14.000 kilos y por ejemplo ayer se redujo a la mitad, rondando los 7.000, según explicó el patrón mayor de la Cofradía de Pescadores de Torrevieja, Pedro Carmona. El mismo apuntó que este verano están faenando en Torrevieja 19 embarcaciones, de las cuales 16 vienen de otros puntos de Murcia y Almería.

La aparición de grandes bancos de sardina en detrimento de los de boquerón se debe a la rotación de los ciclos en los que crece el pescado en alta mar. Fuentes conocedoras de este entorno explicaron ayer que hace unos meses se produjo un ciclo en el que el boquerón prácticamente había desaparecido, lo que provocó que fuera muy difícil localizar los pocos bancos que había. Ha sido este verano cuando esta especie de pescado se ha multiplicado y, con ello, han aumentado las capturas. Pues bien, con la sardina ha ocurrido exactamente lo contrario y es ahora cuando se están localizando grandes bancos de este pescado azul, lo que ha permitido poner a la venta los citados 57.000 kilos.

El hecho de que grandes cadenas de supermercados sigan abasteciéndose de pescado en la lonja de Torrevieja beneficia a los pescadores, que ven aumentado el precio de las capturas. Los pescadores de cerco pertenecen a uno de los sectores que no puede fijar el precio de sus capturas, ya que son subastadas por el sistema «a la baja». Es por ello que las operaciones de estos clientes aumentan la competencia, elevando los precios en primera venta y, consecuentemente, obteniendo más dinero los pescadores.

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