Suciedad, ruido y vandalismo son las principales denuncias presentadas de forma conjunta por comunidades de propietarios y asociaciones empresariales y de vecinos de Campoamor ante el Ayuntamiento de Orihuela. Las quejas han surgido a partir de la celebración cada fin de semana de macrobotellones en la zona. Y la situación no se soluciona.
Mañana, la discoteca Xairo tiene previsto celebrar una fiesta de disfraces en la misma zona. Tras las quejas vecinales, fue aprobada una moción en pleno municipal para impedir el botellón, aunque finalmente tan solo se consiguió su traslado a una zona cercana, "rodeada de varios conjuntos residenciales, donde la Policía Local, tras ser requerida para evitarlo, no interviene", según denuncian los vecinos.
El pasado 5 de agosto, ya se celebró una de estas fiestas, autorizada por el Ayuntamiento. Los vecinos denuncian el "alto riesgo de incendio e inseguidad por la aglomeración de jóvenes que hacían botellón fuera del recinto, en una zona de alto valor medioambiental". Además, aseguran que "hubo destrozos y violaciones a la propiedad privada en los residenciales próximos al evento". Los testigos aseguran que "los principales accesos quedaron bloqueados por la incontrolada aglomeración de gente".
Las distintas asociaciones también denuncian el alto coste de limpieza de las zonas del botellón por parte del Ayuntamiento, que debe desplegar "ambulancias, puestos sanitarios, Protección Civil, bomberos, Cruz Roja y fuerzas y cuerpos de seguridad". Los vecinos de Campoamor exigen que "estas partidas sean invertidas en infraestructuras básicas y necesarias".
Ante las denuncias realizadas, los residentes manifiestan la "total pasividad de las delegaciones municipales competentes en el control de estos eventos". "La situación ha sido repetidamente denunciada por los vecinos, sin que hasta el momento hayamos recibido ni respuestas ni soluciones", denuncian los propietarios.
