El Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente asegura que aplica "escrupulosamente" la normativa vigente en la gestión del trasvase Tajo-Segura, que, en las condiciones actuales, permite seguir transfiriendo agua de una cuenca a otra.
El Ministerio ha respondido así a la exigencia del Gobierno de Castilla-La Mancha de que se paralicen de inmediato los trasvases del Tajo al Segura al encontrarse los embalses de Entrepeñas y Buendía, desde los que sale el agua, por debajo de la reserva mínima de 400 hectómetros cúbicos.
Fuentes del Ministerio han precisado a Efe que la Ley de Evaluación Ambiental establece las reglas de explotación a seguir en el trasvase e incluye un período transitorio de cinco años para alcanzar esa reserva de 400 hectómetros, un criterio que se respeta en el Plan Hidrológico del Tajo aprobado posteriormente.
De ese modo, el nivel de referencia en 2015 es de 304 hectómetros cúbicos, en 2016 será de 336 y así sucesivamente a razón de 32 hectómetros cúbicos al año hasta alcanzar los 400.
El Ministerio autorizó el 31 de julio el envío de 20 hectómetros a través del acueducto Tajo-Segura para el mes de julio conforme a la norma actual y teniendo en cuenta el nivel de agua embalsada en la cabecera del Tajo, que se sitúa en nivel 3, es decir "de circunstancias excepcionales".
La normativa aplicable es fruto de un acuerdo para la regulación del trasvase Tajo-Segura suscrito por las cinco comunidades autónomas afectadas (Extremadura, Madrid, Castilla-La Mancha, Comunitat Valenciana y Región de Murcia).
Según el Ministerio, el objetivo de dicho acuerdo era incrementar las garantías ambientales y de preferencia de la cuenca cedente (la del Tajo), otorgar seguridad jurídica al trasvase y a todos los interesados y mejorar el funcionamiento de la infraestructura.
