La Policía Local tuvo que intervenir ayer en un altercado entre manteros y vendedores del mercadillo semanal de los viernes. El enfrentamiento se produjo en la calle Maestro Casanovas cuando los vendedores, que abonan una tasa por la ocupación de vía pública, recriminaron a un grupo de manteros que se pusieran delante de sus puestos. Los vendedores, en declaraciones a este diario ayer, se lamentaban de la falta de vigilancia, y que ellos mismos tienen que buscarse la manera de evitar que los manteros «les roben la clientela». «Estamos esperando a que la Policía haga algo. Cada metro nos cuesta 100 euros, por lo que no puedo permitir que estén aquí de gratis, y encima que me quiten clientela». Los vendedores piden que se creen grupos de agentes de paisano como los que actuaban hace años. El Grupo de Refuerzo de la Policía Local (GRO) habitual en el mercadillo, no estaba en la zona ayer. Los manteros, la mayoría de origen subsahariano, desplazados del paseo de Juan Aparicio en 2013 han encontrado cobijo en este mercadillo y en todas las playas.

El Ayuntamiento quiere reubicar el mercadillo en el recinto ferial junto a la Avenida de Delfina Viudes en septiembre, cuando esté preparado una línea de bus específica.