Ni la Cofradía de Pescadores de Torrevieja, ni la administración local han considerado la posibilidad de desarrollar proyectos de valorización turística de la actividad de la lonja pesquera que sí se han puesto en marcha con relativo éxito en otras zonas turísticas del litoral, pese a que junto a la lonja sí existe un museo flotante con piezas de la historia marítima de la ciudad y un submarino. En especial las que permiten visitar la subasta a primera hora de la mañana de pescado azul o conocer las interioridades de las artes de pesca. El principal argumento para no contemplar esta posibilidad es que todas las instalaciones desaparecerán con un plan especial del puerto ahora más en el aire que nunca.