Un incendio en una nave de calzado, bolsos y complementos en el polígono de San Juan de Catral obligó ayer a movilizar a los parques de Bomberos de Elche, Crevillent, Almoradí y San Vicente del Raspeig para sofocarlo ante la gran magnitud de las llamas, que alcanzaron a otras dos naves colindantes ante la imposibilidad de controlar el fuego.

El aviso, se produjo a las 15.05 de la tarde, y a pesar de la rápida actuación de los Bomberos, las características y materiales de los objetos que almacenaba la nave hizo que el incendio se propagase con rapidez por todo el espacio industrial. La columna de humo se hizo visible prácticamente en toda la comarca, y podía divisarse desde Elche, Alicante o El Campello, desde donde, según apuntaron fuentes de Emergencias a este diario, llegaron a recibir llamadas de vecinos alertados por la gran columna de humo.

«La elevada carga térmica de estos materiales es lo que ha provocado que la labor de extinción se haya prolongado durante horas y haya sido imposible controlarlo y que se expandiera a otras dos naves cercanas», señalaron ayer fuentes del parque de Bomberos a este diario. Las intensas horas en la labor de extinción, obligó a realizar relevos en los distintos efectivos de estas cuatro localidades que acudieron a sofocar las llamas. Al cierre de esta edición los Bomberos seguían trabajando en la zona, controlando los rescoldos y refrescando los restos de la nave para evitar que se reavivara el fuego por el calor acumulado, y estaba previsto que estos trabajos finalizasen a primera hora de la madrugada de hoy, pasada la medianoche.

Casi diez horas de intenso trabajo ante la mirada estupefacta de decenas de vecinos que se acercaron a contemplar, con preocupación, el avance del fuego. A falta de una investigación para esclarecer el origen del fuego, todo apunta, según los testigos, a que una traca podría haber sido el detonante del incendio. A unos 100 metros del lugar, se encuentra un restaurante donde se estaba celebrando una boda, por lo que los invitados temieron que tuvieran que ser desalojados, aunque finalmente no fue necesario.