Amigos de Sierra Escalona (ASE) ha presentado alegaciones ante la Dirección General de Evaluación Ambiental y el Ayuntamiento de Orihuela contra el proyecto de construcción de un campamento turístico, granja escuela y centro de interpretación en este paraje natural campamento turístico, granja escuela y centro de interpretación y que, precisamente, fue presentado esta misma semana por Sergio Martínez, uno de sus promotores, quien añadió que también se pretende un centro de equitación o paseos en barca por el embalse de La Pedrera. El proyecto no sólo no gusta a ASE, sino que el colectivo tampoco entiende que el Ayuntamiento oriolano, comandado por un ecologista, Monserrate Guillén (Los Verdes) lo haya tramitado con celeridad ante la Conselleria de Medio Ambiente.
En las alegaciones solicita que tras la tramitación del proyecto sea rechazada por su «alto impacto negativo sobre la conservación de los valores ambientales de Sierra Escalona», al tiempo que hacen un concienzudo alegato para explicar los motivos. Entre ellos recuerdan que el paraje está pendiente de su declaración como parque natural -anunciado en el Diario Oficial de la Generalitat el 22 de febrero de 2007- porque entre sus valores se encuentra que tiene una población de aves rapaces muy importantes, «que se sustenta en la abundante fauna esteparia y cinegética que acogen el típico paisaje de Sierra Escalona, compuesto de un mosaico de cultivos de secano y bosquetes de pino carrasco, intercalados con pequeñas manchas de matorral formando un peculiar hábitat de caza para estos depredadores».
El proyecto, entienden, causaría un impacto más allá de las construcciones que se pretende pues se sitúa en plena ZEPA (Zona de Especial Protección de Aves), que es «una de las zonas emblemáticas del paraje». También se omiten las afecciones directas en base a criterios científicos de biología de conservación, «una información crucial para evaluar el impacto ambiental que tendrá el proyecto, como es la afección a las grandes rapaces por la pérdida de terrenos con vegetación natural, lo que supondría la radical transformación y desaparición de una superficie indeterminada del hábitat de caza de aves rapaces como el águila perdicera y el águila real, dos especies que tienen en la Sierra Escalona y la Dehesa de Campoamor una de sus principales zonas de concentración».
