Las ocho ausencias de la bancada de la oposición (6 del PP y 2 de CLr-Claro) permitieron ayer al equipo de gobierno (PSOE y Los Verdes) del Ayuntamiento de Orihuela una victoria en todas las votaciones del pleno, el último ordinario de este mandato. El concejal de Mercados, Manuel Gallud (Los Verdes) aprovechó para colar de rondón su ordenanza de Mercados -la metió en la sesión por urgencia-, que es la misma que fue rechazada hace un mes por los que ayer no tenían votos suficientes para tumbarla. El alcalde Monserrate Guillén (Los Verdes) recuperó ayer por sorpresa una mayoría del plenario que perdió en febrero de 2012 tras marcharse del equipo de gobierno el edil Bob Houliston al poco de su expulsión de CLr-Claro. Desde entonces, el bipartito ha estado a remolque de la oposición sin que las críticas a gobernar en minoría le hayan afectado lo más mínimo. Han seguido pero haciendo ingobernable la ciudad porque no aportaron casi nada de gestión al pleno; y la oposición (el PP primero con Houliston, después con Houliston y con Mayoral y por último, con CLr-Claro) ha aprobado iniciativas que el equipo de gobierno nunca cumplió.
¿Qué supone la ordenanza de Mercados? Poder tener una herramienta de gestión para controlar los populares mercadillos era esencial para el municipio, según Gallud, pues se podrán sacar más de un centenar de puestos cerrados en los nueve zocos que gestiona el municipio (esta semana el edil explicó que algunos, como La Aparecida o La Murada están a punto de desaparecer), que los propios productores vendan sin intermediarios, evitar el enchufismo de a quién se le dan o permitir asentarse a ONG's-.
Y así, Gallud y Rodríguez Barberá, mitad compromiso, mitad desafío, llegaron a un acuerdo durante el debate de introducir algunas modificaciones y de no meter de por medio lo que resta de mandato el espinoso tema del traslado del Mercado de los Martes, que tendrá que decidir la próxima corporación, aunque el ecologista aseguró que se irá dejando la «patata caliente» lista; es decir, sólo a falta de la votación.
Dos debates
Dos debates tenían interés a priori en la sesión, pero la falta de los ocho ediles restó a uno de ellos importancia. Se trataba de la aprobación del Reglamento de Participación Ciudadana que, aunque se aprobó, carecía del quórum necesario para que tenga efectos pues la oposición no lo respaldó y aunque el equipo de gobierno tenía la mayoría ésta no era absoluta (13 votos cuando sólo obtuvo los nueve que siempre tiene asegurados). Curiosamente, según recordó el edil Emilio Zaplana (PSOE) la propuesta era prácticamente calcada a la del grupo popular la pasada legislatura (y esta de las recomendaciones de la Federación Valenciana de Municipios y Provincias), pero ni aún así salió adelante.
El otro asunto, promovido por Houliston, era posicionar al resto de partidos con un tema que será candente la próxima legislatura: las basuras, y si el Ayuntamiento mantendrá la gestión o sacará un nuevo concurso. Y se aprobó, pero sólo con los votos de PSOE y Los Verdes. Igualmente se aprobó la derogación de la tasa de 70 euros del centro ocupacional Oriol y pedir una subvención a Diputación para arreglar el parque de La Regia, en Orihuela Costa.
