La oposición de Almoradí, IU y PSOE, votó ayer en contra del nuevo proyecto del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) presentado por el equipo de gobierno al considerar que el alcalde, Antonio Ángel Hurtado (PP), intenta beneficiar los intereses de las empresas propietarias de 4,5 millones de metros de suelo emplazado en plena huerta. La propuesta salió adelante con los votos de los populares, que cuentan con mayoría absoluta, y pasa a exposición pública.

Las dos formaciones coincidieron en que el documento, que ha incluido esos terrenos como «suelo no urbanizable común de reserva», no se ajusta a lo decretado por la Generalitat, que prohibió expresamente recalificar las parcelas, y creen que responde a una estrategia para que en un futuro ese suelo sea urbanizable.

Durante la sesión, convocada con carácter extraordinario, el concejal de IU Alejandro Lorenzo, propuso retirar del PGOU los tres sectores que se plantean al sur del Segura, calificados como «reserva turística» y que incluyen un campo de golf, al igual que los definidos como «agropecuario, futuros usos residenciales» porque generarían un «negativo impacto ambiental, paisajístico y territorial», especialmente sobre espacios de interés ambiental como el Hoyo Serrano, además del impacto económico sobre la hacienda debido al coste económico asociado a la prestación de los servicios en estos sectores.

«Contemplar estos sectores solo responde a intereses económicos de especuladores urbanísticos», dijo el edil. El concejal pidió igualmente que se retiraran los sectores calificados como «reserva residencial», al oeste; y al sur, en la zona de El Gabato, porque «se plantea una excesiva reserva de suelo en torno a la huerta cuando en la actualidad solo está edificado el 45% del disponible». La formación de izquierdas también aboga por eliminar el centro comercial, donde la Generalitat ha prohibido construir en el 75% del suelo al ser inundable, al estimar que una macrosuperficie comercial afectaría al pequeño comercio.«Para IU el PGOU debe apostar por un urbanismo en torno al núcleo urbano que favorezca la rehabilitación de las viviendas y que permita nuevos crecimientos que respondan a una necesidad social, con una importante proporción de vivienda pública», defendió.

El portavoz del PSOE, Jaime Pérez, consideró que esas reservas de terrenos «en sitios sospechosos solo benefician a los propietarios» y argumentó que con el actual PGOU todavía contempla suelo para el crecimiento esperado, de 6.000 habitantes. El socialista cree que el alcalde «teme un revés electoral» y quiere dejar «atado y bien atado un proyecto con el que está obsesionado».