Torrevieja anunciará, por fin, en la Feria Internacional de Turismo (Fitur), que se celebra esta semana en Madrid, la puesta en marcha del acuerdo para abrir las instalaciones de las salinas a las visitas turísticas, según confirmó el alcalde Eduardo Dolón (PP), el concejal de Turismo Luis María Pizana y el concejal y diputado provincial de Turismo Joaquín Albaladejo. El nuevo servicio turístico -ayer no se desveló la fecha de su puesta en marcha- permitirá utilizar el centro de interpretación de la industria salinera como recinto de visitantes. Este espacio, ahora cerrado, está situado en una antigua cochera de ferrocarril rehabilitada en la Avenida Urbano Arregui. De allí partirá un tren turístico hasta las cercanas instalaciones de la Nueva Compañía Arrendataria de las Salinas de Torrevieja (NCAST), empresa filial de la multinacional francesa Salins du Midi.

Este acuerdo de uso turístico se lleva fraguando entre la salinera, la Generalitat, Patrimonio del Estado (propietaria del suelo de dominio público en el que realiza su actividad industrial la salinera) y el Ayuntamiento desde noviembre de 2012. Se había retrasado por la exigencias impuestas desde el punto de vista ambiental por la Generalitat, dado que la salinera está situada además dentro del parque natural de las lagunas de Torrevieja y La Mata. Su culminación llega justo a tiempo, en año electoral.

Aunque el proceso de extracción de la «cosecha de la sal» tiene un atractivo turístico innegable y el paisaje de las montañas de sal es uno de los que más identifica a la ciudad turística, la salinera no contaba, hasta ahora, con la voluntad empresarial y la infraestructura suficiente para dar a conocer su singular proceso. El proyecto, en su primera fase, contempla que el Centro de Interpretación, arrendado por la NCAST al Ayuntamiento, se convierta en centro de visitantes y tienda de productos relacionados con la salinera y el parque natural. Desde allí partirá el tren turístico que recorrerá las Salinas.

Por otra parte, el alcalde Dolón explicó que, al igual que en las pasadas ediciones, Torrevieja mantiene su presencia dentro del espacio expositivo de la Costa Blanca «presentando así una imagen unificada de la región». El stand prioriza el ahorro de costes y se diseñó con la idea de ser reutilizado en otras seis ferias nacionales. El traslado de material corre a cargo de la Diputación y el Consell, lo que supone «un gran ahorro» para las arcas municipales. El Ayuntamiento aseguró que su presencia en Fitur costará menos de 8.000 euros.

Reuniones

Además de todas las actividades programadas en Fitur 2015, el alcalde y el edil de Turismo mantendrán 15 reuniones con autoridades y empresarios de mercados tradicionales del turismo residencial como Escandinavia, Reino Unido o Alemania pero también otros como Francia, China, Rusia y Argentina, «con el fin de establecer líneas de colaboración con otros organismos que favorezcan una mayor promoción».