El gran letrero que coronaba uno de los edificios del polideportivo de Pilar de la Horadada con la inscripción «Pabellón Duques de Palma» ha pasado a la historia. Operarios del Ayuntamiento se afanaron a primera hora de ayer en retirar una a una las grandes letras después de que todos los grupos que conforman la corporación municipal, encabezada por el gobierno del PP de José Fidel Ros, acordaran recientemente eliminar este reconocimiento honorífico por la implicación de la infanta Cristina y su marido, Iñaki Urdangarín, «en casos de corrupción y evasión de impuestos.

¿Qué se hará ahora con el letrero que ocupaba varias decenas de metros? Eso es algo que todavía no se han planteado en el consistorio. El regidor Ros explicó ayer a este diario que, por el momento, las letras quedarán arrumbadas en un almacén municipal. El primer edil descartó que, en caso de que la Infanta y su marido salgan absueltos del caso Nóos, se vuelvan a colocar estas letras, y apostó porque el edificio continúe funcionando sin ningún nombre específico.

El Pabellón fue inaugurado en 1999, dos años después del enlace entre la hija del Rey y el entonces jugador de balonmano del FC Barcelona. Ese año se disputó allí la final de la Supercopa de España que enfrentó al equipo azulgrana y al Portland San Antonio y la estrella fue el propio Urdangarín, que al año siguiente se retiró como deportista de élite.

José Fidel Ros apuntó ayer que a pesar de este hecho, el Ayuntamiento mantiene «toda su lealtad» a la Monarquía española. Justificó la medida en que existía cierta presión social para eliminar esta distinción honorífica «más todavía cuando se está viviendo un clima de tolerancia cero con la corrupción, algo a lo que me sumo».