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Torrevieja

El Ayuntamiento incumple dos sentencias por no destinar agentes a segunda actividad

El TSJCV falló en julio a favor de un policía con artrosis - En el otro caso el expediente ni está instruido

El Ayuntamiento incumple dos sentencias por no destinar agentes a segunda actividad

Torrevieja no ha cumplido con la ejecución de dos sentencias que habían dado la razón a policías. En un caso, el juez había dado la razón a un agente y ordenaba al alcalde, Eduardo Dolón (PP), que lo pasara a segunda actividad por razón de enfermedad, algo que no se ha cumplido en cinco meses. En el otro, el juzgado ha reclamado al municipio que tramite la petición de otro policía para obtener la segunda actividad, algo que ni se ha valorado administrativamente.

José Carlos Sáez Pedraza lleva 27 años como agente en Torrevieja. Padece una artrosis que le limita la movilidad. El Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana falló a favor de su petición de incorporarse a una segunda actividad - un puesto en el que no tenga que patrullar ni en vehículo ni a pie-. La sentencia es del 9 de junio y daba un plazo de diez días para que le asignara plaza. Pedraza no acaba de entender qué es lo impide que se ejecute, algo que, dice, no depende de los mandos y sí de los responsables políticos. El interesado, incluso, llegó a presentar en el Registro la sentencia. El alcalde le respondió que se la habían notificado el 31 de octubre y que «se están efectuando los trámites necesarios para que en la mayor brevedad posible se lleve a cabo su acatamiento». Ya han transcurrido otros 20 días. El 17 de noviembre el agente volvía a insistir sin obtener respuesta. Sáez continúa trabajando en la calle, con los turnos de noche incluidos.

En una situación similar se encuentra José Luis Huélamo afectado por una rara enfermedad -ataxia espinocerebelosa- que le impide caminar con normalidad. En este caso los juzgados le han dado la razón para que se tramite su petición de segunda actividad, que no fue atendida por la vía administrativa cuando la presentó en julio de 2013. Todavía queda que el municipio la valore y un nuevo procedimiento judicial si se la deniega. Este caso tuvo una especial relevancia porque el agente fue destinado por la Jefatura en febrero de 2012 a la custodia del arco de seguridad del Ayuntamiento y para sostenerse en pie debía valerse de bastones.

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