El secretario autonómico de Autonomía Personal y Dependencia Manuel Escolano explicó ayer que la Generalitat financiará la residencia de día y centro de dependientes en 2015 pero es el Ayuntamiento, como titular del edificio, el que debe decidir y supervisar la fórmula de gestión. Algo que también incluirá, por ejemplo, la estimación del numero de trabajadores necesarios. El recinto costó 4,6 millones de euros y está terminado desde finales de 2011. La falta de presupuesto ha impedido su apertura hasta ahora. Escolano, a preguntas de INFORMACIÓN, explicó que el recinto es de titularidad municipal y es la administración local la que debe escoger la gestión a realizar, a través de una entidad acreditada o por adjudicación a una empresa del sector. Escolano confirmó que su departamento está cerrando las estimaciones de partidas presupuestarias de 2015 para el funcionamiento de estas instalaciones, que en el caso de Torrevieja exigen un presupuesto de entre 300.000 y 400.000 euros.

También indicó que el recinto está a la espera además de recibir la autorización por parte de la Generalitat que valide el edificio para ese uso asistencial y que certifica que cumple la legislación en ese sentido. El cargo autonómico aseguró que no le consta que existan dificultades importantes en este sentido y que la tramitación de estos requisitos que podrían haberse solventado en estos cuatro años- es casi de carácter burocrático y formal-. Otras fuentes ligadas al sector de la discapacidad aseguran que el edificio no cumple alguna de estas exigencias. Es la primera vez desde que se concluyó la obra que la Generalitat le dota de presupuesto.

Asesoramiento

La obra fue sufragada por un fondo estatal y levantada sobre una parcela municipal de 11.000 metros cuadrados, junto a la Avenida de Delfina Viudes. Una vez se confirme el presupuesto la Generalitat sí que se ha prestado al Ayuntamiento para ofrecerle asesoramiento sobre las entidades que se dedican a gestionar este tipo de instalaciones y el procedimiento para adjudicarlas. El espacio se concibió en su día, con bastante indefinición, como una residencia integral de carácter hospitalario con capacidad para más de 80 personas tanto para dependientes psíquicos como físicos. Las limitaciones presupuestarias apuntan a que su uso se orientará sobre todo a acoger a dependientes como centro de día -es decir, con atención diaria y regreso al domicilio-. Entre los dependientes usuarios potenciales del centro estarían enfermos de Alzheimer y Síndrome de Down.