El día 6 de junio de 2011, dos semanas después de las elecciones municipales en las que el PSOE perdió la Alcaldía de Bigastro, el todavía regidor socialista Raúl Valerio Medina cargó un último gasto a la tarjeta de crédito del Ayuntamiento: un almuerzo en uno de los restaurantes más selectos de la Vega Baja, el Silvino de Almoradí, por un importe de 525 euros. No se sabe quién acudió a esa comida ni por qué se sufragó con dinero público, pero lo que sí se conoce es que dicho pago se realizó cuando la economía municipal atravesaba su momento más crítico y los funcionarios llevaban tres meses sin cobrar porque la caja del consistorio estaba totalmente vacía.
Ahora, este y otros gastos han sido revisados por el departamento de Intervención bigastrense, que ha dictaminado en un informe que durante sus dos años y medio como primer edil, Medina gastó hasta 24.146,94 euros en supuestas dietas y atenciones protocolarias e incluso en compras en farmacias y supermercados de las que «no existen tiques ni facturas a nombre del Ayuntamiento», sembrando así la duda de si se trataba de gastos personales que podría asemejar este caso al de las tarjetas «black» de Bankia.
Un repaso a los apuntes contables de la tarjeta de crédito que Raúl Valerio Medina, actual portavoz de la oposición del PSOE y diputado provincial, utilizó durante sus dos años y medio como alcalde de Bigastro (tras la dimisión de su antecesor José Joaquín Moya) da cuenta del elevado nivel de gasto que el socialista cargó a las arcas municipales al margen de su sueldo como primer edil. Como norma general, el exregidor comía y cenaba entre tres y cuatro días a la semana, incluyendo en ocasiones sábados y domingos, con cargo a la tarjeta del Ayuntamiento. Y es que hubo meses, como en mayo de 2009 con un cargo de 1.373 euros a la tarjeta de crédito, noviembre de ese mismo año con 1.425 euros o diciembre con 1.225,36 euros, que evidencian que el exregidor se decantaba por celebrar comidas y cenas cualquier día de la semana en reconocidos establecimientos hosteleros de toda la provincia, principalmente en Almoradí, Orihuela, Elche y Alicante. Como ejemplo, entre el 20 y el 30 de mayo de 2009, el socialista gastó más de 612 euros en comidas y cenas durante todos los días. Incluso el Día del Trabajador, el 1 de mayo, Medina celebró una cena en el restaurante La Arroba de Bigastro y pagó la cuenta de 170 euros con dinero público. Al igual que hizo el día de Jueves Santo de 2011, cuando también pagó con la tarjeta municipal en el restaurante Silvino de Almoradí 416,35 euros.
Geografía
Los gastos en viajes del regidor por la geografía nacional también eran frecuentes y entre el 4 y el 9 de mayo de 2010, de martes a domingo, Raúl Valerio Medina cargó 1.010,90 euros por su estancia en hoteles y comidas en restaurantes de Barcelona y Bilbao. Aunque cuando volvió de ese viaje, los almuerzos en reconocidos establecimientos hosteleros siguieron; dos de los cargos más llamativos son del restaurante La Arroba de Bigastro los días 20 y 28 con importes de 306 euros y 230 euros, respectivamente.
El nivel de gasto era tal que el informe de Intervención del Ayuntamiento señala que hubo 14 meses en los que el regidor llegó a cargar cenas y comidas en la tarjeta del Ayuntamiento mientras que en la cuenta no había dinero por lo que el banco cargó en 14 ocasiones gastos de impago de entre 25 y 30 euros, que suman un total de 379,25 euros. Se dio incluso una ocasión en la que el Ayuntamiento pagó 660,80 euros en metálico al alcalde porque, supuestamente, se los había gastado él con su propia tarjeta y exigió el reintegro. El rastro de la tarjeta de crédito del exalcalde, independientemente de que pueda justificar o no los gastos, evidencia en definitiva que, en plena crisis, nunca se ajustó el cinturón.
