Hace menos de una semana, Trinidad Martínez, portavoz socialista, jefa de la oposición en el Ayuntamiento de San Fulgencio y alcaldesa hasta 2011 por el PSOE, aseguraba en un comunicado que su sucesor, Carlos Ramírez (PP), estaba haciendo campaña contra ella para que, a la vista de que será juzgada a partir del 3 de noviembre por un delito contra la ordenación del territorio (dos años de cárcel y diez de inhabilitación para cargo público le pide el fiscal) no le permitan repetir como candidata en 2015. «Me tiene miedo» afirmaba.
Pues Carlos Ramírez puede estar tranquilo porque según el secretario de Organización comarcal del PSOE, Miguel López, a ella la echaron hace seis años del partido, aunque lo siga negando incluso, cuando se lo preguntó este periódico. Según López, fue suspendida de militancia por acuerdo del PSPV y éste justificó el hecho de que encabezara la lista electoral como independiente en 2011 porque no tenía abierta ninguna causa judicial relativa a su gestión como alcaldesa.
Según el cargo orgánico comarcal del PSOE, aunque ahora vaya a ser juzgada el partido no podría tomar ninguna medida ni presionarla para que abandone su cargo público debido a que ya no es militante. Sorprendentemente añadió que lo que sabe del juicio que sentará a Martínez en el banquillo «es por la Prensa» porque, al parecer, no tiene contacto con alguien que no les representa y a ello se aferran para evitar cualquier crítica del PP. Algo cuanto menos sorprendente si se tiene en cuenta que Martínez será juzgada en pocos días.
Inocente
Los hechos que le imputan a ella y al resto del equipo de gobierno y a los técnicos se remontan a una autorización para construir un bloque de viviendas en una zona reservada a equipamientos deportivos en el PGOU. La Fiscalía ha pedido la nulidad de todas las licencias aprobadas desde el año 2001 y singularmente los acuerdos de la junta de gobierno del 14 de enero de 2010 en la que se daba a la promotora licencia de primera ocupación para 44 viviendas. Para los otros imputados las penas oscilan entre los ocho y los diez años de inhabilitación, así como entre uno y dos de cárcel.
Trini Martínez asegura que es inocente y que saldrá absuelta y culpa a un exasesor del PP de sentarse en el banquillo. Lo cierto y verdad es que el juicio será largo y farragoso porque la titular del juzgado de lo Penal 1 de Orihuela ha fijado hasta 9 sesiones a desarrollar todo el próximo mes.
