La inversión que el Ayuntamiento de Orihuela está realizando en arreglar el reloj de la Plaza de la Centuria Romana, que tenía más de un siglo reloj más de un siglo y que era un ejemplo vivo de la desidia porque ni funcionaba ni le quedaban manecillas y sus paredes de metacrilatos -roñosas y pintadas- mostraban una maquinaria que no funcionaba, lleva camino de dividir, como tantas otras cosas, a los oriolanos que se preguntan a estas horas si cuando los trabajos concluyan el resultado final se parecerá o recordará al entrañable «big-ben» local.
La sustitución de las esferas o la decisión de cambiar los números arábigos por romanos sustitución esferas cambiar arábigos romanos -el edil de Infraestructuras, Víctor Ruiz (PSOE), lo justificó para que estuvieran en consonancia con el nombre de la plaza- ya dividen a algunos viandantes y comerciantes de la zona que no saben cuál será el resultado final. «Lo mejor que nos puede pasar es que no nos acordemos de cómo era antes de la reforma», aseguraba ayer un vecino.
Ruiz acometió a comienzos de este mes un proyecto necesario para la mejora urbana de la ciudad y especialmente de la plaza en la que se sitúa, que está olvidada con desperfectos por doquier, cristales ajados y pinturas que son obra de un vandalismo creciente, por desgracia, en el corazón del casco urbano y muy cerca del centro histórico.
Los trabajos, teóricamente, tienen que concluir esta semana porque el edil aseguró que estarían en tres semanas; de hecho, han comenzado a tomar forma.
Víctor Ruiz invierte un coste de 16.200 euros en ese proyecto, lo que supone la contratación de dos empresas distintas para, dijo, «acabar con la desidia y el abandono de los sucesivos responsables municipales».
Recuperación
Una de las empresas contratadas para esta tarea está especializada en la recuperación de relojes como este y otra de cerrajería es la que se está encargando de la restauración exterior. El edil aseguró que también pretende acometer otras mejoras en este espacio de la ciudad para adecentar el entorno y eliminar grafitis y pintadas.
