El alcalde de Orihuela, Monserrate Guillén, quien está de baja tras sufrir un infarto en julio, eligió ayer «Facebook» para dar sus explicaciones de los motivos que lo llevaron a presidir el domingo la procesión de la Virgen de Monserrate en Torremendo, su pedanía. «Parece ser que estar de baja por haber sufrido un infarto me impide acompañar a mis vecinos (...) aunque no creo que la Inspección de Trabajo venga a por mí, sí quiero explicar que decidí participar en este acto porque me lo pidió el alcalde pedáneo y porque era la última procesión de este mandato.

No quería perderme ese momento. No quería que el primer alcalde nacido en Torremendo se perdiese, quién sabe, la que podría ser la última procesión de la patrona de mi pueblo a la que asistiese como tal (...) Me parecía un poco ridículo salir como alumbrante por estar de baja por enfermedad, así que participé en la presidencia del acto, como en los últimos años».