El Ayuntamiento de Dolores, dirigido por el socialista Joaquín Hernández, exigirá formalmente a la Conselleria de Sanidad que atienda las necesidades de una niña de la localidad llamada Mónica, de tres años, que no ha podido comenzar las clases porque es portadora de una traqueotomía. La Generalitat ha rechazado disponer una enfermera en su centro escolar para que actúe en caso de que la cánula que le permite respirar se tapone o se salga de su sitio, porque habría que cambiarla en cuestión de segundos par evitar la asfixia. Mientras tanto, sus padres han decidido que no empezará el colegio hasta que su seguridad no esté garantizada.
El alcalde tildó ayer de «inadmisible discriminación» el hecho de que la pequeña no pueda empezar el colegio porque el Departamento de Salud de Orihuela haya denegado la presencia de personal sanitario en el centro. La única solución que la Conselleria ha puesto encima de la mesa es que un educador del centro sea «adiestrado» para poder socorrer a la niña en caso de que lo necesite y hasta que se pueda desplazar un enfermero, algo que no convence a sus padres porque consideran que un educador no está preparado para afrontar una situación de urgencia en la que la vida de su hija pueda correr peligro.
«No entendemos que Sanidad no dé solución a este problema ya que los médicos dicen que la menor puede empezar el colegio», lamentó ayer el regidor. Hernández aseguró que pondrá sobre la mesa «todo lo que esté a mi alcance para que esta niña pueda empezar las clases con normalidad y si hay que ir a Valencia a decírselo al conseller, no tendremos ningún problema en ir. Es inadmisible esta discriminación puesto que con voluntad todo se puede. A la Conselleria de Sanidad le falta mucha voluntad para buscar remedio a los problemas de la gente», continuó el alcalde. Joaquín Hernández insistió en que no puede pasar «un día más sin que esta niña empiece la escuela como todos los demás ya que tanto padres como los médicos aseguran que está en condiciones de hacerlo. Lo que no entendemos es que Sanidad no facilite las cosas», concluyó.
