La CHS explicó ayer que los sedimentos que están apareciendo esta semana en Orihuela no son más que «un fenómeno natural del río Segura. El azud de los regantes, necesario para que haya nivel y puedan coger el agua en las tomas, provoca que se asienten más fácilmente». En el caso de que proliferen, la Confederación tiene previsto actuar.
Un fenómeno natural