La asociación Orihuela Sin Barreras denunció ayer que el lugar elegido para la recepción en honor del Síndico Portador de la Gloriosa Enseña del Oriol no cumple con las normas exigibles para estos casos.

Carmen Díaz Martínez, presidenta de Orihuela Sin Barreras fue distinguida en 2013 con ese mismo nombramiento como reconocimiento de su labor por conseguir una «Ciudad para todos». Su discurso se basó en la demanda de mayor accesibilidad.

Belén Cascales, vicepresidenta de la asociación recordó que ocurrió lo mismo con la recepción en los Pozos de Cremós y que «edificios y recintos de este tipo deben estar vetados o clausurados para estos eventos públicos» y no pueden callar ante hechos como este.

«Ya basta de rampas y más artilugios para suplir la falta de eficacia y carencia de sensibilidad de un equipo de Gobierno que no ha entendido todavía que la accesibilidad es un derecho respaldado por la ley y no un juguete para cuando me interesa», dijo Cascales.