La exalcaldesa de Orihuela Mónica Lorente (PP) ha afirmado que el proceso de adjudicación del servicio municipal de basuras, por el que hoy ha declarado en calidad de imputada, fue "impecable y así se ha demostrado".

Dicho proceso es una de las numerosas piezas del denominado 'caso Brugal', una investigación que se inició en torno a las basuras de Orihuela y de la comarca alicantina de la Vega Baja pero cuyas pesquisas -principalmente derivadas de escuchas telefónicas autorizadas judicialmente- originaron otras causas.

Tras salir de los juzgados oriolanos, Lorente ha calificado de "importantísima" esta comparecencia, durante la cual, según ha dicho, se ha sentido "tranquila, satisfecha y contenta".

"He dicho absolutamente toda la verdad y ha quedado acreditado que yo no tengo nada que ver con el asunto, tal y como he defendido siempre", ha afirmado Lorente, quien a su llegado al juzgado fue increpada por una treintena de manifestantes.

Acusada de supuestos delitos de prevaricación, revelación de secreto o información privilegiada, actividades prohibidas a autoridades, tráfico de influencias y fraude, la exalcaldesa y actual edil del PP figura como imputada en esta causa junto a otras 28 personas más por supuestas ilegalidades en la adjudicación del servicio de recogida de residuos de la ciudad.

En declaraciones a la prensa, ha manifestado que su letrado ha aportado documentación para acreditar que durante su etapa como alcaldesa de Orihuela -entre 2007 y 2011- "no pertenecía a la comisión informativa ni tenía delegación de contratación en el Ayuntamiento".

Durante su declaración, que ha durado algo más de dos horas, la exalcaldesa ha respondido a las preguntas de la magistrada encargada del caso, del Ministerio Fiscal, cuyo trabajo en este asunto ha calificado de "pormenorizado, profesional y exhaustivo" puesto que le ha preguntado "por todo desde el año 2005", y a las cuestiones formuladas por su defensa.

Por contra, se ha negado a responder a las partes personadas en el caso porque "son muchas y no acabaríamos nunca", al tiempo que ha insistido en que la figura de imputada es un "derecho de garantía procesal que implica una obligación".

El auto de imputación, con fecha del 4 de junio de 2012, citaba a declarar a Lorente como imputada cuatro meses después.

Sin embargo, Lorente presentó un recurso contra el documento alegando, entre otros, "indefensión" al considerar que disponía de un "escaso margen de tiempo para examinar o instruirse de las actuaciones llevadas a cabo durante más de cinco años", del que finalmente desistió.

Al finalizar su declaración, ha añadido que en los tres informes policiales en los que se basa el auto de imputación, especialmente el tercero de ellos que enumera la lista de personas directa o indirectamente relacionadas con esta causa, "no aparece mi nombre, ni en conversaciones ni en grabaciones".

Antes de la declaración de Mónica Lorente ha comparecido ante la juez el que fuera alcalde de Orihuela entre 1995 y 2007, José Manuel Media, imputado en este asunto por un supuesto delito de prevaricación.

A su salida del Juzgado de Instrucción número 3 de Orihuela, encargado del caso, Medina ha manifestado que ha dicho "la verdad", algo que no entraña "ninguna dificultad".

El exalcalde ha subrayado que "nunca" ha comprendido su imputación en esta causa y ha pedido el archivo de la misma".