La nueva ordenanza de ocupación de vía pública para el sector hostelero y comercial será aprobada provisionalmente en el próximo pleno, a final de junio aunque no estará vigente todavía para esta temporada estival. Como novedades principales y cumpliendo las dos grandes reivindicaciones de la hostelería y el comercio, el texto regulariza el mobiliario fijo para sillas y mesas de los bares y restaurantes como toldos, paravientos, tarimas y otros elementos ahora prohibidos. También da el visto bueno a los comerciantes a exponer y comercializar casi todo tipo de productos en la calle. La ordenanza los limita ahora a libros y prensa.
El documento, mucho más detallado que el vigente, se extiende en el proceso para pedir las autorizaciones con ese tipo de mobiliario, en el que se indica que será necesaria la presentación de una memoria descriptiva, además de documentación del negocio 20 días antes de la instalación y un depósito de garantía estimado en la ordenanza en función de cada metro cuadrado ocupado.
Cientos de bares y comercios locales trabajan ahora al margen de la norma aprobada en 2003. La nueva no llegará a tiempo para la temporada estival. Algo especialmente delicado cuando además la Policía Local está sancionando a docenas de establecimientos por incumplir la actual. Cuando la nueva sea aprobada con los votos a favor del equipo de gobierno del PP, será sometida a exposición pública con su publicación en el Boletín Oficial de la Provincia, aproximadamente en la primera semana de julio. El plazo de exposición será de 30 días. Si el municipio opta por resolver las alegaciones y aprobar el texto definitivo con un pleno extraordinario la norma podría entrar en vigor a mediados de agosto como muy pronto. Si, en cambio, espera al pleno ordinario de agosto estará vigente en septiembre.
En el caso de los comercios la nueva norma divide en dos las zonas en la que se puede usar el dominio público para ofertar productos -vestido, calzado, bolsos, libros, prensa, artículos de playa, joyería, relojería, bisutería, juguetes, artículos de deporte, flores plantas y comercio al por menor de ferretería-. Una zona específica en el centro y sus paseos y la otra para al resto del término. La única diferencia entre ambas es que las zonas que no son del centro no aparece autorizada la venta de artículos de playa, jardín, souvenirs y ferretería.
En otros aspectos la ordenanza no cambia. Por ejemplo, no permitirá la ocupación de la vía pública en una fachada distinta a la del local, salvo con autorización de los vecinos o la comunidad afectados.
