La empresa Lomas de Campoamor S.A., que realizó el desmonte de unas 50 hectáreas de suelo no urbanizable de protección ecológica en febrero, ha pedido licencia ahora para realizar esas obras que ya están terminadas. De hecho, en la zona, situada entre Las Filipinas y La Ciudad de las Comunicaciones, «de extraordinaria riqueza natural» y junto a Sierra Escalona, ya hay plantados cítricos, según explicó ayer la Asociación de Vecinos San Miguel Arcángel. La empresa ha presentado ante el Ayuntamiento la solicitud de licencia para movimiento de tierras con el objetivo de adaptarlas para la producción agrícola.

Incluso el Boletín Oficial de la Provincia del 23 de abril publica un anuncio, como paso previo a la obtención de licencia, donde se invita a la ciudadanía a opinar sobre la repercusión paisajística de las obras, como si no estuvieran ejecutadas, algo que para las mismas fuentes «parece una burla». La actuación con maquinaria pesada fue denunciada en el Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil de Alicante en febrero. En la misma zona, pero en término de Orihuela, también se produjo un desmonte.

Yacimiento arqueológico

El terreno contaba con poblaciones de pinar y monte bajo de matorral mediterráneo. Entre otras especies, podían encontrarse pies de coronilla de fraile, espino negro, enebro, romero, lentisco o Palmito. Era el hábitat natural de comunidades faunísticas (aves, mamíferos, reptiles y anfibios, insectos, etc.), asociadas a los ecosistemas que ahora han sido destruidos. Además, según el colectivo, este enclave se sitúa a un punto «de interés geocientífico excepcional», catalogado por el Estudio de Impacto Ambiental del PGOU como un yacimiento de vertebrados fósiles marinos.