Asun Mayoral reapareció ayer en la primera línea de la política local -no daba una rueda de prensa desde el 3 de enero- y lo hizo para defender al equipo de gobierno de las graves acusaciones que el lunes les lanzó en una comparecencia la portavoz del PP, Mónica Lorente, y el concejal Juan Ignacio López-Bas a cuenta de las basuras y en la cual aseguraron que el alcalde Monserrate Guillén (Los Verdes) falseaba las cifras de lo que cuesta este servicio al punto de asegurar que se está gastando 1,8 millones de euros más de lo presupuestado (9,1 millones de euros), lo que explicaron con base en el 20% de costes indirectos que éste no suma. Pero, según Mayoral, eso es falso porque cuando el Ayuntamiento asumió el servicio, la contrata ya facturaba más de 10 millones de euros por el canon «y el informe del interventor certifica que en 2013 el coste de servicio no ha subido de 9,1 millones. No ha subido respecto a lo que el Ayuntamiento pagaba en 2011, cuando no estaba municipalizado. Cuánto costaría hoy, si se privatizara, nadie lo saben. En cualquier dato, están dando datos erróneos y falsos».

Mayoral recurrió a su pasado en el área de Contratación, a comienzos de legislatura, para rebatir una por una las acusaciones de los dos partidos que en diciembre pactaron un acuerdo hasta final de legislatura que tenía como único objetivo la privatización. Según la edil, el servicio no está asumido de forma provisional por el Ayuntamiento sino de forma definitiva y en esa situación sólo se encuentra la plantilla de trabajadores a falta de un proceso de selección. «La municipalización (del servicio) no es provisional, es definitiva por mucho que se empeñe en lo contrario López-Bas y Mancebo».

Transparencia

Según la concejala, la supuesta falta de transparencia no es del equipo de gobierno, tal y como aseguraba Lorente y López-Bas, sino de los liberales, «fue Marta Campillo (edil no adscrita por CLr-Claro) la que, siguiendo instrucciones de Mancebo, decidió a través de un decreto dejar sin efecto la publicidad de todos los contratos relativos a la basura que yo había acordado hasta que me echaron. No pueden venir a dar ejemplo de transparencia aquellos que centran su programa de gobierno en licitar el contrato de las basuras», dijo en referencia al pacto firmado por ambas formaciones en diciembre, tres meses antes del informe en el que Lorente y López-Bas se basaron el lunes para justificar su ataque a la gestión pública de las basuras que justificaría esta decisión.

Además, contó una curiosidad. Si el lunes López-Bas acusó a Guillén de fraccionar en dos contratos la adquisición de ropa de verano y de invierno, ayer Mayoral dijo que esta decisión fue de su compañero Mancebo cuando asumió ese área y no del alcalde. Y la edil acabó asegurando que el interés por privatizar las basuras no es en beneficio de los vecinos y de Orihuela, «obedece a otros personales que no tiene nada que ver con el de los ciudadanos».